miércoles, 3 de abril de 2002

El domingo echaban Corazón Salvaje. Cuando la estrenaron, en el 91, la vimos Ana y yo de la mano. A Ana le he dado la dirección para que lea todo esto. No quería que nadie conocido lo supiera para no cortarme a la hora de escribir. Pero con Ana no importa porque es un trocito de mi alma, así que no hay nada que no pueda saber. Con Ana me pasa que me pongo un poco líricocoríntellado cuando escribo sobre ella. Pero no pasa nada. El año pasado escribí un cuento corto sobre un sueño (real como la vida misma) en el que salía ella y me lo publicaron en una revista de la facultad de Letras. Yo creo que ni lo ha visto. El otro día la escribí un mensaje "Otra noche maravillosa con Anita. Eres mi primavera". Lo bueno de los mensajes cortos es que luego te acuerdas de lo que has puesto y no tienes que romperte la cabeza intentando averiguar si has metido (¡otra vez!) la pata.
Por lo demás todo este tiempo ha transcurrido como era de esperar, como pasan las cosas ahora. Pequeñas dosis, amor infinito, desear a chicas no muy conocidas (las amigas de Ana) y nada de sexo.
El blogger de lamentira (tiene un enlace a la izquierda) me ha escrito para darme una recomendación. Así que ahora tengo un link a mi email (también a la izquierda, supongo) y dos lectores. Aunque es posible que Ana ni se acuerde. También ha salido una frase mía en Sonria de Tequila, que es un sitio que está muy bien para empezar a conocer los weblogs. Y que es y tiene arte, dicho queda.
Mañana tengo mi gran fiesta en la terraza. Noelia va a ir. Hoy me ha dicho que le ha gustado mucho mi penúltimo reportaje. Y no tiene pinta de decir las cosas por decir, ni de ser una pelota. Es más, no la pega nada decir esas cosas con su enternecedora pose de medio dura (chicazo, dice su madre). La he querido dar un poco de caña (porque eso de que sea tan bueno las abuuuurre) diciéndola que no tenía posibilidades de pillar en mi fiesta (es que son 19 tías buenas confirmadas y sólo dos tíos y yo, me parece que me he pasado) y me ha respondido con eso. El caso es dejarme desarmado. No sé, alguna me lo podría poner fácil de vez en cuando, que yo para los acertijos soy penoso.
Mañana, de resaca os contaré alguna triste historia, no creo que haya mucho sexo en el texto (o eso espero, porque lo más probable es que se quede a dormir conmigo mi amigo gay).
se despide virgenypenoso